La Corporación Chilena de la Madera, CORMA, se ha planteado objetivos en el mediano y largo plazo que tienen por objeto mejorar las condiciones y especialización del trabajo en el sector forestal, que exige, entre otras iniciativas, concentrarse en la formación de las personas que allí se desempeñan y que constituyen el recurso más valioso del sector.
Esta formación debe integrar diversas áreas de la práctica y del conocimiento, abarcando la seguridad y salud ocupacional, la gestión medioambiental, las relaciones con la comunidad y las competencias laborales, todo debidamente articulado, de manera que el aporte individual y colectivo nos permita desarrollar un sector cada vez más sustentable y competitivo.
El valor de la seguridad, como nuestra piedra angular y uno de los fundamentos principales de la actividad en el sector forestal, debe ser entendido y asumido por todos, partiendo por uno mismo.
La prevención de los accidentes debe estar basada en un profundo cambio de conducta, que privilegie el cuidado individual y también colectivo, sobre la base del respeto y cumplimiento de los procedimientos y normas aplicables en cada puesto de trabajo.
Este es un tema que no sólo repercute en el trabajo. Lo hace, en esencia, en el seno familiar del trabajador que le despide cada jornada con la confianza de verlo regresar sano y salvo al final del día. No hay valor más trascendente que la familia unida y feliz, razón por la cual valoramos tanto nuestro lema: “Para los forestales, la seguridad es lo primero”.
Precisamente, por todo esto, CORMA ha trabajado con ahínco desde hace años en fortalecer la seguridad laboral y salud ocupacional de las empresas asociadas, gracias a lo cual el sector forestal ha logrado reducir la tasa de accidentabilidad anual de 9,9% en 1994 a 1,1% en 2012.
Si consideramos que el gobierno propuso alcanzar una meta de accidentabilidad de 4,0% el año 2015, podemos sostener que las empresas socias de CORMA están transitando por el camino correcto para lograr su objetivo de llegar a cero accidentabilidad.
Para lograr lo anterior, la mesa forestal de seguridad y salud ocupacional inició una campaña que tiene por objeto contribuir en el afianzamiento de una cultura de prevención que se encamine a “CERO ACCIDENTES” en el sector forestal, trayendo consigo un impacto positivo en los trabajadores, en su red de protección familiar y laboral, y en los empresarios de servicios y pymes forestales.
La iniciativa se basa en un trabajo conjunto con el ministerio del Trabajo, la Dirección del Trabajo, el Instituto de Seguridad Laboral, la Confederación Nacional de Trabajadores Forestales (CNTF), la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), el Instituto de Seguridad del Trabajo (IST), la Mutual de Seguridad y las pymes forestales y madereras.
Estamos conscientes de que se trata de un desafío complejo, pero tenemos la convicción de que con el involucramiento de todos y con mucha determinación, es posible desarrollar planes y programas que guíen a las empresas y a sus trabajadores a establecer una cultura preventiva que se traduzca en cero accidentabilidad.
Por medio de esta campaña esperamos llegar a más de 50 mil trabajadores y mil 500 pymes del sector forestal, de quienes esperamos su adhesión voluntaria y su compromiso de capacitar a sus trabajadores en aspectos relevantes de la prevención de riesgos.
Pero, sobre todo, aspiramos a promover y fomentar entre los empresarios pymes los lineamientos básicos de una conducta laboral segura y saludable, que desde luego contribuirá a mejorar el grado de satisfacción en el trabajo y en el hogar.
Este desafío exige desplegar un esfuerzo transversal que convoque a la alta dirección de las empresas, a los expertos en seguridad, a los comités paritarios y a los propios trabajadores y sus organizaciones sindicales, para hacerse parte y compartir tan elevados propósitos de la seguridad en el trabajo.
Esta iniciativa conjunta e integradora nos permitirá construir políticas, planes de acción y procedimientos claros de prevención de riesgos laborales y enfermedades profesionales, que cumplan cabalmente la normativa vigente y entreguen a los trabajadores las herramientas necesarias para evitar su exposición a riesgos de accidentes, posibilitando, además, establecer un marco de referencia de excelencia para la industria forestal que tanto desarrollo, empleo y crecimiento ha creado en beneficio del país.
La invitación a todos es a seguir trabajando juntos, a mirar el futuro con optimismo y a creer en las capacidades de cada trabajador forestal, junto a su esposa e hijos, para llevar a cabo un cometido trascendente, que les reconforte y les haga sentirse orgullosos de la gran familia forestal chilena.
Marcelo J. Aceituno Puga
Presidente Depto. Seguridad y Salud Ocupacional
CORMA Biobío
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