El potencial forestal asociado a la superficie de bosque nativo manejable en la región (58,6%) es una de las principales razones por las que la
Región de los Ríos es considerada región forestal, así lo manifestó el Director Regional de la
Corporación Nacional Forestal (CONAF), Fredy Ortega, quien aseguró que para estos efectos la institución tiene grandes desafíos: “
Uno de ellos es potenciar el sector maderero, para esto, es necesario facilitar el diálogo entre públicos y privados con el fin de coordinar acciones e instrumentos de fomento que permitan un funcionamiento articulado en virtud de un objetivo común” dijo.
Para estos efectos, desde la región del Biobío hasta Los Ríos, está sesionando el Consejo de la Industria Secundaria de la Madera, donde participan actores públicos y privados asociados al sector. Frente a esto, Ortega aseguró que “El Consejo, se encuentra tomando ciertas medidas, como por ejemplo solicitar a la
Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) que parte de los establecimientos a construir, utilicen madera como principal material de construcción, todo esto con el propósito de potenciar su uso e incluir en las edificaciones aspectos culturales de nuestra zona sur”, puntualizó.
En este contexto, cabe destacar que las acciones desarrolladas pueden provocar resultados positivos para Los Ríos, para esto se requiere el trabajo coordinado entre servicios del estado, actores locales y del sector forestal, de manera de coordinar instrumentos de fomento productivo, esfuerzos y voluntades, que permitan potenciar a la región de Los Ríos en el sector maderero.
Vínculos que promueven el sector
El Plan de Agregación de Valor al Sector Forestal del
Instituto Forestal (INFOR), surge a solicitud del Gobierno Regional de Los Ríos y tiene por objetivo otorgar valor agregado a los productos que tienen como materia prima la madera, motivo por el cual es necesario visibilizar a la región.
Para lograr aquello – además de potenciar la vinculación entre las empresas del sector forestal y las instituciones de educación – el INFOR y la
Universidad Santo Tomás (UST), desarrollaron el concurso “Diseño e imagen del plan de agregación de valor para la madera de la Región de Los Ríos”. Esta iniciativa, contó con el patrocinio del “Fondo para la Innovación y la Competitividad (FIC)” de la Corporación de Desarrollo Productivo, y
buscaba establecer un logo que fortaleciera la relación entre el sector productivo con los liceos técnico – profesionales que tienen dentro de sus especialidades la construcción en madera: “generar este vínculo apunta a que los jóvenes profesionales, puedan especializarse y capacitarse en las técnicas que requieren las empresas del rubro, favoreciendo con ello la contratación de mano de obra local, y fortaleciendo el capital humano del sector forestal de la región” aseguró el investigador del INFOR, Dante Corti.
Como resultado del concurso, la marca “Bosques fluviales” y el eslógan “El valor de la madera renace en Los Ríos” del estudiante de la carrera de Diseño Gráfico, Brian Cortez, se adjudicó el primer lugar.
Cortez, desde niño estuvo vinculado a la madera ya que su madre lleva años en el rubro de la artesanía, situación que le ha permitido conocer y aprender las similitudes y diferencias entre un tipo de madera y otra, no obstante, aseguró que hizo muchos esquemas antes de llegar al boceto que le permitió ganar el concurso. El estudiante, recalcó que intentó hacer un diseño simple que tuviera la capacidad de comunicar mucho: “Traté de ver qué nexo tenía la madera con la región en sí, y el ciclo del agua fue lo que más me inspiró, sus estados – sólido, líquido y gaseoso – están muy presentes en nuestro clima, influyen en el desarrollo de los bosques y en el diseño de la madera, de sus vetas, de los anillos que finalmente reflejan este ciclo”, afirmó.
Educar para potenciar la región
Otra de las grandes brechas que impiden el posicionamiento de la madera en el sector forestal, es la mano de obra calificada, la cual permite mejorar la calidad de productos vinculados a la madera que hay dentro de la región, lo que se traduce en una mayor competitividad dentro del mercado. Según el Gerente de la Corporación de Desarrollo Productivo, Gonzalo Espinoza, la falta de mano de obra especializada se debe al poco incentivo que reciben los estudiantes – por parte de sus docentes – para desarrollarse profesionalmente en el área: “Esta es una tremenda perspectiva y oportunidad de trabajo para los jóvenes, pero lamentablemente no hemos sabido motivarlos, faltan técnicos especializados en todo tipo de productos del uso de la madera, es por esta razón que hemos realizado gestiones para poder implementar – en el área de la educación – medidas que permitan profundizar el aprendizaje de estas temáticas”, aseguró.
Además, mencionó que la falta de preparación afecta incluso a la pequeña y mediana empresa, ya que automáticamente las PYMES se ven en la obligación de asumir costos de formación que generan un aumento en el valor de productos, situación que afecta a la comercialización de ellos.
La
seremi de Agricultura de Los Ríos, Claudia Lopetegui, señaló que la falta de tecnologías avanzadas en faenas de producción o la incorporación de nuevos mecanismos operacionales, impide que la madera logre tener un mejor desarrollo y posicionamiento, no obstante señaló – al igual que Espinoza – que “
el capital humano es una de las brechas que hay que acortar con urgencia, ya que independiente de que poseamos las mejores tecnologías, no servirán de nada si es que no poseemos mano de obra especializada capaz de emplearla”, dijo.
Añadió además que: “La mano de obra especializada está siendo sumamente valorada porque prácticamente no está quedando, es necesario tener buenos trabajadores en maquinarias, cosechas, motosierras, carpintería, mueblería, etc., ya que finalmente hay que considerar a toda la cadena de producción de madera, independiente de su área”, puntualizó.
Es necesario apoyar las mejoras de la cadena productiva del sector forestal para darle valor agregado a la madera, además, es necesario potenciar la investigación para poder incorporar al pequeño y mediano propietario forestal y a las Pymes forestales, actores que tienen mucho que ver en el avance sustentable del mundo silvícola.