Dos nuevas obras públicas de Concepción privilegian uso de la madera

Dos obras emblemáticas de  la Región del Biobío de uso público y masivo tendrán a la madera como protagonista de su diseño constructivo. Se trata de la ampliación del Aeropuerto Internacional Carriel Sur, en Talcahuano  y de la remodelación del Terminal de Buses Collao, en Concepción.

En Carriel Sur se consideró el uso de madera como factor muy importante para  las obras de ampliación que se iniciaron en agosto último por parte de la empresa que se adjudicó la segunda concesión del terminal. Este material  ya se había privilegiado en el diseño antiguo del edificio terminal de pasajeros y se mantendrá ese carácter en el nuevo  aeropuerto. Habrá madera en la techumbre y desde el primer hasta el segundo nivel, de modo que el pasajero pueda apreciarla durante  todo el trayecto que deba recorrer en sus trámites.

Carriel Sur es un terminal aéreo alternativo al Aeropuerto de Santiago, Arturo Merino Benítez. Atiende un millón de pasajeros por año y gracias a la nueva licitación podrá recibir dos millones de pasajeros, los que tendrán la oportunidad de apreciar la madera, producto característico de la Región del Biobío.

Identidad y Calidez

Para el contrato de diseño de las obras de la nueva concesión, la arquitecto Evelyn Reid Vera, inspectora fiscal de la Dirección de Aeropuertos del MOP, afirma que “continuar el uso de la madera en Carriel Sur es súper importante porque es un producto típico de la zona, que le da identidad al lugar. Creceremos con la madera”.  

Respecto de las características técnicas del edificio terminal de pasajeros, indica que lo que está definido es el diseño a nivel de anteproyecto referencial, donde la techumbre es en pino radiata sin nudos de tipo sólido. La Dirección de Aeropuertos formuló consideraciones técnicas y el nuevo concesionario definirá los aspectos específicos para su construcción.

En el Terminal Collao, en tanto, más de 2.900 m2 de madera se utilizarán en la remodelación y ampliación de revestimientos de cielo y en estructuras de tabiques de oficinas.

Se decidió usar  madera laminada de pino radiata, libre de nudos sueltos y sin manchas en la estructura de techumbre del  nuevo edificio y también en los revestimientos, cubriendo una superficie del orden de 800 m2. En las boleterías y oficinas del segundo piso, en tanto, se usará pino dimensionado de 100,5 mm  x 50 mm para cubrir una superficie de 1.020 m2 y se emplearan placas aglomeradas del tipo MDF para el revestimiento de los tabiques interiores. En la techumbre del área del hall, de aproximadamente 2.100 m2, se consideran revestimientos de traslapo de pino radiata sin nudos sueltos.

Iván Castillo, arquitecto proyectista de la segunda etapa e inspector técnico de la totalidad de la construcción, explica que la primera etapa del edificio nuevo comprende 2.070 m2 y la segunda 1.000 m2 y en total el nuevo recinto, incluidas las superficies originales, tendrá 4.778 m2.

El profesional indica que optaron por la madera “por la calidez que brinda,  considerando  que la altura del hall es de 4,40 metros y en el punto más alto es de 6 metros, así  las personas que ingresan  no se sienten abrumadas por la sensación de altura, dado que la madera hace que esto no se perciba. Algo que  solo lo logra la madera”.

Otras obras

Estas obras se agregan a otros importantes edificios públicos que ya han optado por la madera en Concepción. Entre ellas, destacan las vigas laminadas de los techos de los Mall Plaza (Del Trébol y Mirador); el puente de madera tensada “La Mutual” sobre la autopista Concepción Talcahuano; la piscina temperada de los Campos Deportivos Llacolén; el gimnasio del Club Deportivo Alemán en San Pedro de la Paz; el edificio de Lenguas de la Universidad de Concepción; la ampliación de la Escuela de Construcción Civil en la Universidad del Biobío, entre otros.

El ingeniero civil y docente de la Universidad del Biobío, Juan Marcus, considera que en  obras de uso público, incluso tan masivas como Carriel Sur, “La Mutual” y el Terminal Collao, se ha  elegido madera porque con las vigas de este material se pueden lograr grandes luces-  (distancia entre apoyos) – a lo que se agrega que son arquitectónicamente bonitas. 

Añade que las estructuras de madera son fáciles de transportar y montar. Advierte sí que en general, esta madera para infraestructura abierta y de uso público debe protegerse del sol, el agua, termitas y el fuego, para lo cual existen herramientas de diseño y tecnología muy avanzadas. “Si se utilizan bien, la madera es un material casi eterno”, afirma categórico.

En general, se usa madera de pino radiata y las vigas son de madera laminada o tablas unidas con adhesivo en prensas especiales, según normas que existen respecto de ello. Para cumplir la resistencia al fuego se diseñan con un sobre ancho de aproximadamente 2,5 cm por hora de resistencia y también cumplen con la norma de diseño sismo resistente. 

Al respecto, Marcus, quien participó como calculista en la construcción de la pasarela peatonal “La Mutual”, destaca que esta obra soportó sin problema el terremoto del 27/F.

Desde la academia local se han realizado y continúan desarrollando esfuerzos por introducir la tecnología para construir este tipo de viaductos con madera tensada, una buena opción para reemplazar y restituir los más de cinco mil puentes de madera que existen en el sur de Chile y que requieren mantenciones y cambios periódicos. Estructuras de este material se utilizan en Noruega, Suecia, Finlandia, Suiza, Alemania. Allá los puentes son de mayor longitud que los chilenos y sirven para el transporte vehicular con carga pesada mayor que la nacional.