Director ejecutivo de CONAF descarta que existan árboles pirogénicos

El director ejecutivo de la Corporación Nacional Forestal, Aarón Cavieres, aseguró que “técnicamente, no existen especies pirogénicas propiamente tales y que son los bosques los que requieren de un tratamiento cuando están cerca de los centros poblados”, aspecto que, por lo demás, está regulado y fiscalizado por la legislación actual. 

El personero expuso ante la Comisión de Agricultura del Senado, la visión de la autoridad forestal sobre el proyecto de ley en primer trámite constitucional, que busca modificar la Ley de Bosques y prohibir nuevas plantaciones forestales con especies consideradas altamente combustibles y el reemplazo de los llamados “bosques pirogénicos” cercanos o dentro de los límites urbanos. La iniciativa es impulsada por los senadores Lily Pérez, Francisco Chahuán, Alejandro Guillier, Antonio Horvath y Ricardo Lagos Weber.

El representante de la institución aclaró además que tanto el pino como el eucalipto, especies apuntadas como pirogénicas, “no se encienden solas sino que requieren de un foco de fuego para quemarse”. 

Añadió que en las especies nativas también existen árboles que se vuelven altamente combustibles bajo condiciones de estrés hídrico, como el litre y el boldo, y recordó que el año pasado se quemó un helicóptero absorbido por las llamas de un boldo, precisando que los incendios forestales, normalmente se originan por la forma en que se manejan las especies, por lo que se mostró en contra de prohibir la plantación de alguna variedad en particular.

Manejo silvícola preventivo

En la sesión de la Comisión, a la cual concurrieron representantes del Ministerio de Agricultura, de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) y de la Universidad de los Andes, Aarón Cavieres también se refirió a las empresas forestales, indicando que cuentan con planes de prevención de alta efectividad, destacando que han incrementado los recursos que destinan a esta gestión e incluido a las comunidades aledañas en su área de preocupación. 

Agregó que las empresas no sólo consideran su entorno de afectación, sino que llegan hasta uno o dos kilómetros más allá de su área de explotación e informó que han implementado planes complementarios de prevención.

El ejecutivo también recordó que la regulación actual ya consagra la obligación de contar con planes de prevención de incendios en los predios con aptitud forestal y que CONAF ha fortalecido su labor fiscalizadora para controlar que cada predio cumpla, efectivamente, con la obligación de tener un plan de prevención y combate de incendio dentro de su plan de manejo. 

Atendiendo a estas consideraciones, destacó que el organismo forestal ha puesto su foco en los planes de prevención, conocidos como silvicultura preventiva. Detalló que se están desarrollando planes de silvicultura preventiva con municipios, empresas y algunas localidades para despejar el entorno de las ciudades de material herbáceo y leñoso y disminuir la densidad de entrada a los bosques, lo que conlleva el corte y la poda de una determinada cantidad de árboles. 

Asimismo, se ha dotado de mayores recursos a CONAF, para que refuerce sus brigadas de combate a los incendios forestales.