Biomasa permitiría el autoabastecimiento energético de la región de Los Ríos

Leiva tiene 40 años y es ingeniero forestal de la Universidad Austral de Chile, además de director del Cefor, dependiente de esta misma casa de estudios. 

¿Cuál es el potencial económico que representa la biomasa para la región de Los Ríos?

Tremendo, si uno considera la cantidad de biomasa disponible en los bosques de la región. Cuantificarlo rápidamente sería difícil ya que los datos que se manejan son de superficie y el volumen de lo que se puede obtener, por ejemplo, la región tiene una superficie aproximada de 1 millón 800 mil hectáreas, y de ese total 1 millón 50 mil son sólo bosques lo que representa a un 60% de la superficie regional, lo que refleja un potencial gigantesco.

¿Qué cualidades ofrece la biomasa, en comparación con otras fuentes de energía utilizadas en nuestro país?

La principal es que es una energía renovable y no un derivado del petróleo -como las demás fuentes que predominan en nuestra matriz energética- y que su balance en términos de carbono es neutro o sea, que su uso no genera emisiones netas de carbono a la atmósfera. En segundo lugar, entre las energías renovables no convencionales la biomasa es gestionable, lo que no ocurre con las energías que dependen del sol o el viento o el agua.  Su tercera cualidad, extremadamente importante, es su costo: es la energía más barata a la que podemos acceder en este momento. Y los estudios indican que en el mundo actual una de las cosas que más afecta al bolsillo de las personas es el costo de la energía, ya que no solo necesitas la energía eléctrica que consumes en tu casa, sino también la que requieres para cocinar, bañarte y movilizarte. Entonces, bajar sus costos podría contribuir a disminuir la pobreza.

¿Qué beneficios podría aportar a la región y al país utilizar la biomasa como un recurso energético permanente?

Todas nuestras proyecciones en términos de disponibilidad de este recurso están hechas considerando un manejo sustentable de los bosques, lo cual significa no hipotecar la productividad de los sitios a futuro y no generar, en este sentido, problemas en el plano ecológico. Por otro lado, en función de la cantidad de energía que podemos generar con la biomasa existente –más de 200 megas–, podemos afirmar que Los Ríos podría autoabastecerse sin inconvenientes.

En cuanto a empleo generado, por lo demás, la biomasa también resulta ventajosa… 

La biomasa es un multiplicador gigantesco de trabajo. Está calculado que su producción genera 15 veces más puestos de trabajo que la producción de combustibles fósiles, lo que brinda una excelente oportunidad para contribuir con la empleabilidad de las personas, no tan solo en la región sino que en el país completo.

¿Qué experiencias internacionales interesantes existen en utilización de biomasa?

Suecia es uno de los grandes íconos, seguido por Suiza y Alemania. Y si bien es cierto que la tecnología de biomasa en estos países existe, no es lo mismo implementarla allá que implementarla en Chile, ya sea por la idiosincrasia como por las condiciones. Por lo tanto, considero que deberían existir fondos y políticas claras que contribuyan a la investigación y adaptación de dichos modelos.

¿Qué políticas públicas debieran implementarse en Chile para promover el uso de la biomasa?

Considero que lo más importante es la voluntad política: que el Estado se comprometa con políticas energéticas de apoyo a las energías renovables no convencionales. Pero sobre todo apoyando la biomasa, ya que somos un país extremadamente rico en este recurso. Aunque el discurso político siempre afirma que somos pobres en cuanto a recursos energéticos -porque claramente somos pobres en recursos energéticos tradicionales como el petróleo y el gas- claramente somos riquísimos en energías renovables no convencionales.

¿Es posible que la generación de energía a partir de biomasa se transforme en una oportunidad para que los pequeños propietarios de plantaciones puedan entrar al negocio?

Sin duda alguna. Suecia, por ejemplo, tiene un modelo formidable ya que allí no existen grandes propietarios de tierra sino pequeños y medianos propietarios que están organizadas en cadenas de producción eficiente de biomasa. Pensando en Chile, no consideraría socialmente correcto que se concentrara toda la producción en grandes empresas, sino que más bien fueran los pequeños y medianos productores los responsables de representar a este sector y que ellos pudieran acceder a la información y la capacitación necesarias para incorporarse existosamente a esta cadena de producción.

¿Sólo a partir de plantaciones de pino y eucaliptus o hay potencial para producir biomasa con otras especies?

No sólo con pino y eucaliptus. El 99% del pino en esta región pertenece a las grandes empresas, pero 50% del eucalipto está en manos de pequeños y medianos propietarios, el que podría utilizarse para este negocio. Todo lo demás tendría que provenir de un manejo sustentable de bosque nativo, determinado en función de restricciones ambientales, demográficas, etc.

¿Cuáles son las principales dificultades que enfrenta la biomasa para lograr mayor protagonismo en nuestra matriz energética?

Pienso que Chile necesita de autoridades con visiones claras de futuro, ya que es necesario implementar mecanismos legales que nivelen la cancha en cuanto a cómo compiten las energías renovables no convencionales versus las otras energías. Además, creo que incentivar a las personas con subsidios para las primeras inversiones sería un buen camino, ya que éstas son muy costosas pero también muy necesarias para generar el cambio.