Aprobosque: propietarios de bosque nativo en pos de una producción sustentable

En junio pasado, como ya es tradición para cada año, la Corporación Chilena de la Madera entregó los Premios CORMA con los que distingue a trabajadores, empresarios y organizaciones comunitarias que han contribuido en forma destacada al impulso de la gestión forestal chilena.

En la categoría de organizaciones comunitarias, el premio para la región de Los Ríos recayó en Aprobosque, una asociación gremial constituida en 2010 y que reúne a 27 propietarios de bosque nativo, la que fue destacada por su labor en el manejo sustentable de sus bosques con fines productivos. 

Dicha asociación se enfoca hacia la producción maderera, sin descartar otros usos no madereros tales como el turismo y la venta de bonos de carbono, entre otros.

El presidente de Aprobosque, Jan Köster, al ser consultado por los desafíos que tiene esta asociación forestal, señaló: “A corto plazo queremos ampliar nuestra base de socios, para extender nuestra presencia en los bosques y tener mayor poder de representación ante las autoridades. A mediano plazo, queremos obtener mejoramientos en la ley y sus reglamentos, además de cambios en el actual foco de fiscalización hacia uno de fomento positivo y apoyo asociativo”.

Agregó que “a largo plazo, queremos que se consolide una cultura de manejo sustentable del bosque nativo chileno y que se desarrolle una industria sólida que aporte valor agregado a los productos del bosque”.

Frente a esto, el Director del Departamento de Bosque Nativo de CORMA Los Ríos, Helmut Keim, expresó que “la ley y sus reglamentos tienen una serie de deficiencias en relación al objetivo para el cual fueron creados. En resumen, todo el sistema legal es una fuerte traba que representa un costo administrativo muy grande para los propietarios, que les dificulta rentabilizar los manejos del bosque nativo. Las tareas que se ha planteado Aprobosque han sido precisamente las de contribuir con argumentación técnica para promover una mejora en la actual normativa, lo que es positivo”.

Manejo sustentable de bosque nativo

El presidente de Aprobosque asegura que un bosque bien manejado bajo esquemas de sustentabilidad, provee de productos que pueden comercializarse como derivados de un proceso de creación respetuoso con el medio ambiente y los valores socioculturales, lo que le da un gran valor frente a otras maderas que provienen de fuentes desconocidas.

Agregó que “la producción en el bosque es fundamental, ya que permite financiar el manejo mediante la venta de los productos. Y que sea sustentable significa que tenemos claro qué y cuánto podemos extraer para que las áreas nativas mejoren y no se degraden. La certificación forestal respalda esto mismo y es algo que Aprobosque en un futuro cercano tiene como desafío abordar formalmente”.

Köster asegura que “queremos participar de la toma de decisiones al más alto nivel del país en cuanto a bosque nativo se trate. Tenemos la experiencia práctica necesaria y creemos que las casi 5 millones de hectáreas potencialmente productivas de bosque nativo en Chile deben potenciarse para ser una fuente renovable de productos y servicios. Creemos que es la mejor forma de desarrollar la economía rural y de proteger nuestros bosques de la degradación y desaparición”.

Frente al reconocimiento obtenido, Jan Köster señaló que “el premio lo recibimos con gran alegría y entusiasmo, ya que es un espaldarazo a la gestión que hemos realizado en la región. Significa que hay muchos ojos puestos sobre nuestras actividades, siguiendo y apoyando el mismo objetivo de desarrollar la productividad del bosque nativo”, enfatizó.

Bosque nativo en Los Ríos

Es importante destacar que en la Región de Los Ríos, según cifras entregadas por CONAF, existen 849.702 hectáreas de bosque nativo.

Según cifras entregadas por el Instituto Forestal, INFOR, la región cuenta cuenta con 533.415 hectáreas con potencialidad productiva maderera. De ella, 53,1% corresponde a bosques adultos, 36,2% a renovales (un bosque nativo secundario originado de semillas y/o de reproducción vegetativa después de perturbaciones tales como incendios, talas rasas o derrumbes) y 10,7% corresponde a un bosque renoval adulto.