Un muy buen recuerdo se trae Chile de la Expo Milán 2015, exposición realizada entre mayo y octubre de este año, en la que más de 140 países expusieron sus productos y servicios enfocados en el desarrollo de una industria agroalimentaria sustentable.
Nuestro país obtuvo la medalla de plata en la categoría Arquitectura y Paisaje por la belleza, creatividad arquitectónica y sustentabilidad de su pabellón, bautizado como “El Amor de Chile”.
Construido íntegramente en madera, uno de los elementos más llamativos fue una mesa de carácter escultórico de 48 metros de largo, diseñada por el artista Osvaldo Peña íntegramente en lenga (Nothofagus Pumilio), especie también conocida como Cerezo chileno.
Esta noble madera nativa, que crece en la zona austral de Chile, fue suministrada por Ignisterra, empresa que hace un manejo forestal sustentable de sus bosques de lenga en Tierra del Fuego, certificado por el sello internacional FSC (Forest Stewardship Council).
Según destaca Lorenzo Constans, comisionado de Chile en la Expo MIlán 2015, "uno de los íconos de nuestro pabellón fue la Mesa de Chile. Con más de 45 metros de largo, permitió que diariamente miles de personas pudieran degustar comida chilena. La mesa tenía como objetivo ser el lugar de encuentro, de acogida, de conversación y de intercambio cultural, y estoy seguro que se cumplió desde el primer día con éxito".
En tanto, la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, recordó en la cuenta pública de la Expo Milán, que conserva vivo el recuerdo de lo que fue la llamada Mesa de Chile, "por la que pasaron miles de invitados que degustaron lo mejor de nuestros alimentos típicos, preparados por una selección de chefs de todos lugares del país".
Inspirada en nuestra geografía
La mesa fue construida en la planta de remanufactura que Ignisterra posee en Villa Alemana, Quinta Región, con un diseño alargado e irregular, inspirado en nuestra geografía y que emula la imagen de potencia alimentaria y forestal que nuestro país quiere proyectar.
La estructura de la mesa la sostenían seis figuras humanas de tamaño real, también esculpidas en lenga. Como complemento, se agregaron más de un ciento de bancas trabajadas en la misma madera.
Las bases de la mesa, de la misma forma y tamaño que las banquetas, se hicieron con una estructura negra que las separaba de la cubierta, para crear el efecto de una cubierta flotante.
Para resaltar la bella tonalidad y la hermosa veta de la madera de lenga, las cubiertas de todas las piezas de madera se diseñaron en forma irregular y se trabajaron en forma casi artesanal, cada una concebida como una pieza única que refleja el uso responsable de la madera.
Natural y sustentable
La elección de la mesa no fue al azar, puesto que el lema de la Expo Milán 2015 fue “Alimentar el planeta, energía para la vida”. Por esto, el propósito era representar a quien trabaja la tierra, produce el alimento, lo transporta, cocina y, finalmente, lo comparte.
“En la mesa se disfrutan los alimentos que se cosechan de la tierra, donde también crece la lenga”, dice Rodolfo Tirado, gerente general de Ignisterra. En este sentido, explica que el propósito era invitar a personas de todo el mundo a sentarse juntos a comer, disfrutar y compartir los frutos y productos del país, "en un entorno inspirado en lo natural, sustentable y con identidad nacional".
La mesa fue desmontada para traerla de vuelta a Chile, y se planea instalarla en algún lugar público para exhibirla en forma permanente y permitir que más chilenos puedan admirar la belleza y versatilidad de nuestra madera nativa de lenga.
Acerca de Ignisterra
IGNISTERRA es una empresa chilena que desde hace más de 20 años se dedica a la producción de puertas y otros productos elaborados con madera de lenga (Nothofagus pumilio), una de las especies nativas más nobles y apreciadas, debido a su calidez y belleza. Al ser una madera nativa, la lenga tiene características propias de un bosque natural, en donde cada pieza tiene colores y vetas únicas, diseñadas por la misma naturaleza con el paso del tiempo.
IGNISTERRA posee bosques propios en Tierra del Fuego, en el extremo sur de Chile, los que son manejados en forma sustentable, según los criterios del ente certificador internacional FSC. También cuenta con una moderna planta de remanufactura en Villa Alemana. Más información sobre la empresa y otras líneas de productos en www.ignisterra.com
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