Chile, como todo el planeta, vive efectos del cambio climático, un fenómeno global frente al cual los bosques, nativos y cultivados, tienen un papel clave pues contribuyen a mitigar el efecto invernadero, a capturar CO2 y purificar el aire. Los reportes que ha hecho el país referente a sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), indican que el sector forestal aporta positivamente a la mitigación, ya que las plantaciones y los bosques nativos son importantes sumidero de gases.
Lo señala así el ingeniero forestal Pablo Honeyman, una de las voces autorizadas en el tema, ya que es investigador en el Centro de Estudios en Recursos Oterra, dependiente de la Escuela de Ingeniería Forestal de la Universidad Mayor. Magíster en Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, tiene especial interés en el desarrollo de técnicas novedosas de manejo forestal para Bosque Nativo y Plantaciones, aplicando metodologías innovadoras de Ordenamiento Territorial, Ordenación Forestal y Restauración Ambiental.
Ha participado en numerosos proyectos como el de Apoyo en la generación y análisis de las causas de la deforestación, degradación forestal y no aumentos de existencias de carbono forestal, identificándose opciones para enfrentarlas en el marco de la Estrategia Nacional de Cambio Climático y Recursos Vegetacionales en Chile, en el que tiene un rol de investigador principal. Es autor, coautor o colaborador en numerosas publicaciones y desarrolla docencia y gestión académica destacadas.
¿Cuáles son los efectos que advierte usted del cambio climático en nuestro país?
Llevamos ya un período de cinco años de sequía, y a pesar de que este año con Fenómeno de El Niño suponía un aumento de las precipitaciones, aun no llegamos a niveles normales de precipitación acumulada; pero aunque lo fuera no es suficiente para compensar el déficit que tenemos hacia atrás.
La mayoría de los reservorios de agua dulce, los tranques están a su mínima capacidad, incluso algunos secos, y eso tiene impactos en la agricultura, en la ganadería, en la producción de energía, y en todos los sistemas productivos que ocupan el agua como insumo. Eso está generando cada vez más conflictos por uso de agua: en sectores rurales hay que profundizar los pozos para poder regar, las napas subterráneas se empiezan a desecar y eso afecta tanto a los ecosistemas naturales, como a los sistemas productivos artificiales, es decir, es una red de complicaciones lo que genera la escases de agua.
¿Cuánta superficie cubren los bosques en Chile, desglosando en nativos y plantaciones?
En Chile hoy día existen alrededor de tres millones de hectáreas de plantaciones y cerca de 14 millones de bosque nativo. Nuestra superficie forestal es 17 millones de hectáreas.
¿Las plantaciones forestales contribuyen a la reducción de factores del cambio climático?
Todos los reportes que ha hecho el país referente a sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), indican que el sector forestal aporta positivamente a la mitigación, ya que las plantaciones y los bosques nativos son importantes sumidero de gases. En ese sentido, las plantaciones que se hicieron y se hacen sobre suelos degradados, han generado nuevas áreas sumidero que seguirán aportando a reducir las emisiones a nivel nacional.
Lo importante es que las nuevas plantaciones consideren el tema de adaptación al cambio climático.
¿Sería preferible mantener los bosques nativos y/o replantar con esas especies o la silvicultura puede aportar también positivamente?
No hay un camino, todos los caminos aportan. Por una parte debemos reducir las emisiones por degradación y deforestación de los bosques, aumentando las áreas manejadas sustentablemente, comenzando procesos restaurativos, y preservando donde sea necesario. Por otra parte, debemos aumentar los sumideros de carbono forestal con nuevas plantaciones productivas bajo esquemas de manejo forestal mejorado, y también otros tipos de plantaciones con objetivos diferentes.
¿El consumo de leña y la agricultura intensiva han incidido en el cambio climático?
Chile tiene un aporte mínimo a las emisiones de CO2e en comparación con otros países, nosotros somos cercanos al 0,3% de las emisiones mundiales y si lo disgregamos en actividades como agricultura o consumo de leña el impacto es mucho menor todavía, es difícil decir que el uso de leña en Chile tiene un impacto importante en el cambio climático a nivel mundial. Sin embargo, todos los países, sectores económicos y actividades productivas, tienen un rol en la mitigación del cambio climático, y es innegable que la agricultura y el consumo de leña generan emisiones que están cuantificadas, y estas pueden ser reducidas mejorado prácticas, o compensadas a través de diversos mecanismos existentes.
Finalmente, el profesional añade que en Chile es fundamental una gestión de bosques, y que aunque el país tenga muchas otras prioridades, la gente debe saber que estos recursos tienen alta importancia por los beneficios ecosistémicos que prestan.
“En la política forestal los ejes más importantes a contemplar son los esfuerzos en lograr que los privados puedan hacer un manejo sustentable de los bosques, para ponerlos en valor y asegurar así su conservación en el tiempo. Para esto, es necesario tanto el apoyo técnico como instrumentos de fomento forestal adecuados, expeditos y flexibles, y que se hagan cargo de la gran heterogeneidad de condiciones que existen, concluye el investigador.
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