Con el fin de crear conciencia sobre el autocuidado de los trabajadores y el compromiso de los empresarios por ofrecer las condiciones de seguridad necesarias para evitar accidentes, se está desarrollando en la Región del Maule por segundo año consecutivo la campaña comunicacional “Para los forestales la seguridad es lo primero”.
La iniciativa es impulsada por la Mesa Forestal de Seguridad y Salud Ocupacional, que integran la Corporación de la Madera (CORMA), el Ministerio de Trabajo, la Dirección del Trabajo, el Instituto de Seguridad Laboral, la Confederación Nacional de Trabajadores Forestales (CNTF), la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), el Instituto de Seguridad del Trabajo (IST) y la Mutual de Seguridad.
La industria forestal representa un motor de la actividad productiva en el Maule con alrededor 200 empresas entre aserraderos, barracas, elaboradoras de madera y plantas de impregnación. Los niveles de seguridad varían de acuerdo a sus tamaños y trayectoria. Los esfuerzos apuntan a llegar a cubrir la seguridad de las 20 mil personas vinculadas al sector.
El encargado de Seguridad en CORMA Maule, Alex Leiva, explica que el foco de la campaña de los forestales por el cero accidente está en las pequeñas y medianas empresas, que son las que tienen las mayores dificultades para disponer de los profesionales o las asesorías para la prevención de accidentes.
La campaña se ha difundido en 45 empresas pequeñas y medianas, de un total de 195 que actualmente operan en la Región del Maule.
Si bien el grueso de las empresas forestales está concentrado en las comunas de Maule, Constitución, Empedrado, Talca y Curicó, hoy las 30 comunas que componen la Región cuentan con una empresa o instalación forestal.
“En el área forestal hemos mejorados las condiciones de prevención y seguridad, pero aún queda mucho por hacer. Hay muchos grupos objetivos donde podemos trabajar e ir mejorando la cultura de la prevención. Un trabajador tiene que hacer las cosas bien, utilizar los procedimientos pues así va a poder volver a casa y disfrutar con su familia”, sostiene Alex Leiva.
“A su vez los empresarios deben garantizar los recursos adecuados como los elementos de seguridad personal y las condiciones y ambientes laborales propicios para el trabajo seguro”, agrega.
La campaña considera visitas a las empresas y la entrega de elementos de difusión, entre ellos un manual que contiene las 10 reglas básicas y 7 mejores prácticas, relacionadas al uso de elementos de seguridad, la comunicación interpersonal y el uso de maquinarias.
“Este trabajo se debe realizar con empuje y con convicción. No existen reglas ni multas, pues lo que aquí se busca es compromiso para lograr un cambio cultural. La prevención de los accidentes debe basarse en el cambio de conducta de cada persona, desde el punto de vista del autocuidado y respeto por el cumplimiento de los procedimientos y normas en los puestos de trabajo”, explica Leiva.
Para lograrlo, esta campaña no sólo involucra a los trabajadores y empleadores, sino que también a sus familias poniendo en valor el bien común del grupo familiar.
Para el gerente general del aserradero Inmafor de Talca, Alexis Iriarte, la prevención es un eje central en el desarrollo de su empresa y por eso participan de la campaña. Cuenta que han hecho un esfuerzo importante y hoy disponen de un profesional en prevención de riesgos, programas y planes de emergencia y funciona el comité paritario que beneficia a sus 34 trabajadores.
“Nosotros compartimos que la prevención y el cuidado de la seguridad de los trabajadores es esencial en el desarrollo de la empresa. Nosotros trabajamos con mucho elementos de cortes y hay ciertos procedimientos establecidos que tienen los operadores y sus ayudantes antes de utilizar las maquinarias”, señala Iriarte.
Roberto Morales, gerente de Maderas Preserva señala que “para nosotros es de vital importancia la prevención de accidentes dentro de nuestras plantas productivas como también en el trayecto de nuestros trabajadores desde y hacia sus hogares. Periódicamente hacemos charlas en conjunto con nuestro prevencioncista y organismos como la mutual. Hemos implementado las 10 reglas básicas de seguridad y salud ocupacional que se las recordamos frecuentemente a nuestro personal”.
El experto en prevención de riegos y académico de la Universidad Santo Tomás de Talca, Tomás Alarcón Palma, ha identificado tres factores que dificultan la implementación de medidas de seguridad. Lo llama: “No sabe”, “No puede” y “No quiere”. Es decir, la falta de conocimiento, voluntad y motivación para actuar bajo procedimientos normados y seguros.
“Junto con difundir información, la estrategia debe propiciar el cambio de actitud de los actores al interior de las empresas de manera que el trabajador y su empleador se protejan mutuamente”, acota el experto.
De acuerdo a las primeras evaluaciones de la campaña comunicacional, lo más relevante ha sido la acción en terreno a través de los medios de comunicación y las actividades de forma directa con los trabajadores, que han ayudado a generar una cultura de seguridad que involucra a sus familias.
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