Un importante acuerdo que permitirá mejorar la protección de suelos y cursos de aguas en las plantaciones forestales bajo planes de manejo, suscribieron la
Corporación Nacional Forestal, Empresas Forestales y la Corporación Chilena de la Madera, CORMA, en la región de La Araucanía.
La firma del convenio que logró aunar criterios entre actores públicos y privados, es el primero en su tipo en el país, y estipula disposiciones que no estaban consideradas en la normativa actual de regulación de plantaciones forestales, y que llevará a las empresas de manera voluntaria a ejecutar acciones para preservar suelos y aguas en zonas de protección.
Alberto Hofer, el seremi de Agricultura, subrayó que el convenio se enmarca dentro de las políticas del Ministerio de Agricultura que tiene que ver con la protección de los recursos hídricos, y el sector forestal ha querido participar del proceso. “Estamos en una época de cambio climático y en la medida que nos ocupemos de nuestros recursos hídricos podemos tener una ventaja comparativa con otras regiones del país. Este uno de los temas de los que debemos ocuparnos, por tanto, la protección de cursos de agua es fundamental para La Araucanía”.
El presidente de Corma Araucanía, Patricio Santibáñez, afirmó que lo relevante del convenio es que fija criterios con los que se van a ejecutar los planes de manejo de cosechas y plantaciones en la Región. “Se establecen medidas de protección a los cauces de agua, ríos, esteros, quebradas, donde básicamente se busca que exista una vegetación nativa alrededor de esta zonas y restablecer esa vegetación en el caso que no esté. Esto, tendrá un efecto en el entorno, porque tendremos un paisaje más matizado, y se suma a la acciones que se están realizando en la región en el tema de la disponibilidad de agua en áreas adyacentes a las plantaciones”.
El director regional de Conaf, Mario Acuña, destacó que la intendencia regional les puso como carta de navegación trabajar en la solución de los problemas de agua. “Este convenio sella un importante acuerdo entre el sector público y privado y va en beneficio de los habitantes de la región. Sin duda, es un avance importante para aminorar las consecuencias negativas del cambio climático, y desde ese punto de vista es un paso importante para el desarrollo de nuestra región”.